Fin de semana en París


Roma planea aterrizar en París dentro de un mes.
Peparada París?????

Paris, bouge pas! On arrive!

Luces en movimiento (Elda)

Rincones de Elda que conocemos, desde una óptica distinta, luces en movimiento, ...
... otro modo de ver lo mismo.
Las primeras fotos en nuestro flickr.
Gracias al fotógrafo que nos las ha cedido!!


En Roma no hay reyes

En Roma no hay reyes, ni cabalgata, ni roscón, ni regalos el 6 por la mañana bajo el árbol. Aunque en Italia el 6 de enero es festivo, y era de esperar que en un país "tan cristiano" y con el vaticano como estado integrado dentro de la ciudad en la que vivo desde hace ya casi un año (madre mía tanto??!!!), hubiese tres señores magos recorriendo Via del Corso sobre sus camellos y entregando oro, incienso y mirra en un belén viviente que temblase en las sombras del Coliseo... no es así. Y es que como decía, y lo repito porque aun no he terminado de creérmelo: este año no tendré reyes, ni cabalgata, ni roscón, ni regalos el 6 por la mañana bajo el árbol... ni nada.


A Italia viene la befana, que es una bruja vieja que trae dones a los que han sido buenos y carbón a los que no lo han sido tanto. Por si no teníamos bastante con el gordo de rojo destrozando nuestras tradiciones aquí tenemos a esta viejecita que destrona a sus majestades reales y deja a los niños italianos (y a los que ya no lo somos tanto pero nos sentimos igualmente inocentes el día de reyes) con un par de caramelos dentro de un calcetín o un trozo de turrón dulce. Y ya está.


De todos modos, como no soy de las que se pierde las cosas, y me gusta integrarme en la vida del país que habito iré a conocer a esta befana a la Plaza Navona mañana por la mañana. Y ya os contaré la experiencia.


Los que estáis en España, saludar a Melchor, Gaspar y Baltasar de mi parte, y si me dejasen algo bajo el árbol, ¿podríais mandármelo por correo?

Nochevieja Romana

Dos de nosotras vivimos la nochevieja en la ciudad eterna. Y aunque la ciudad no la vimos casi, ya que el diluvio nos impidió salir a la calle casi toda la noche, y cuando lo conseguimos ni nosotras veíamos tanto o no había ya tanto que ver, en casa vivimos una fusión de culturas inolvidable. Y a media noche la cuenta atrás se unió a las doce uvas y tres españoles en medio de 16 italianos intentamos traer un poquito de nuestra tierra y nos impregnamos de la suya con los fuegos artificiales que nos sorprendieron en el balcón.

En resumen: Mucha lasaña, lentejas que traerán dinero, uvas en papel de los chinos, una tarta con un 2010 escrito con monedas de chocolate, el negroni que no conseguimos beber, bailes de grupo proyectados en la pared, y muchas risas. ¿Cómo fueron las noches viejas en París y en Elda?